El vidrio es un material que se puede reciclar al 100%. Su reciclaje es una de las tareas con las que frenamos el crecimiento de los vertederos, ahorramos energía y evitamos más emisiones de CO2. Pero sabes cómo se hace paso a paso el reciclaje de vidrio. A continuación, te contamos cómo se lleva a cabo este proceso.
En Gadisa siempre hemos apostado por el reciclado. Un sistema de reciclaje y reutilización con el que contribuimos al cuidado del medio ambiente. De hecho, durante el pasado año 2020 aumentamos en un 8% el volumen de reciclaje con respecto al año anterior. Una cifra que supuso el reciclaje de más de 9 millones de kilos de cartón, plástico, madera y vidrio.
¿Cómo se hace el reciclaje de vidrio?
El reciclaje de vidrio requiere de un proceso que se inicia en el momento que introduces tus residuos de vidrio en su contenedor correspondiente. De allí van a la planta de reciclaje, en donde se lleva a cabo el proceso que transformará los residuos en una nueva materia prima. No importa el número de veces que un vidrio es reciclado, ya que siempre mantendrá el 100% de sus propiedades iniciales.
Los consumidores depositamos el vidrio y un camión lo recoge
El primer paso para el reciclaje de vidrio es depositar estos residuos en el contenedor verde. Aquí debes introducir botellas de vidrio sin corcho o tapón, frascos de vidrio y los tradicionales tarros de alimentos sin tapa.
No se debe introducir cerámica, porcelana, cristal de copas o vasos, bombillas o espejos. Una vez depositados, y en función de los horarios y frecuencias de paso de cada lugar, un camión encargado irá recogiendo todo lo que se haya vertido en el contenedor verde.
El vidrio se limpia, se tritura y se trata en una planta
Este camión de recogida dirige los residuos de vidrio hasta la planta de reciclaje. Una vez aquí, los residuos se colocan en diferentes cintas para eliminar las posibles impurezas y retirar las tapas, tapones y restos de material plástico, cerámica y porcelana que pueda haber. Cuando estén limpios, todos los residuos se trituran y se separan por colores para obtener más tarde lo que se conoce como el calcín.
Finalmente, se eliminan los restos y se obtiene una nueva materia prima
Por último, este vidrio triturado pasa por unas máquinas provistas de lectores ópticos para eliminar cualquier resto opaco de otro material que aún pueda haber. Una vez eliminados todos los posibles restos se obtiene ya el calcín. Estos pequeños trozos de vidrio limpio son los que, finalmente, se convierten en una nueva materia prima con la que se generan envases, botellas, etc.
Este es, en definitiva, el proceso de reciclaje del vidrio. Una tarea fundamental con la que se fabrican nuevos envases con los que ahorrar más de un 50% de emisiones de CO2.
Asimismo, se reduce casi en un 40% el consumo de energía y la extracción de más de un millón de toneladas de materias primas. Cifras todas ellas que nos dan una pequeña idea de la importancia que tiene concienciar a la sociedad en el reciclado del vidrio.
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